ESPECIALIZADA EN TRADUCCIÓN AUDIOVISUAL


Toda traducción que se precie no puede recordarnos que es una traducción, debe parecer un texto producido en esa lengua. Si esto es importante en otras modalidades de la traducción, en la audiovisual lo es aún más, ya que de lo que se trata es de producir textos orales, en los que prime la naturalidad y la verosimilitud de los diálogos. Ante cualquier chirrido de la lengua, el espectador corre el riesgo de verse abstraído del hilo argumental. Y eso es lo que los profesionales de la traducción y adaptación audiovisual debemos evitar a toda costa. Somos los artesanos que damos forma y cuerpo a esos diálogos que llevarán al espectador a adentrarse en esa ficción y dejarse seducir por ella, tal como la concibieron sus autores.
 
No rompamos esa magia.